El hidrógeno verde, clave de Iberdrola para lograr una transición energética
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Hace más de 20 años, Iberdrola inició operaciones en México, con el objetivo estratégico de contribuir al desarrollo energético sostenible del país, invirtiendo con fuerza para el aprovechamiento de los recursos naturales, y reducir el impacto ambiental.
Actualmente, nuestras instalaciones de energía renovable suman 7 parques de energía eólica (693MW), y 3 parques fotovoltaicos (470MW), con ubicaciones estratégicas en los estados de Oaxaca, Puebla, Guanajuato, Sonora, y San Luis Potosí, y que suministran a industrias tan diversas como la automotriz, minería, manufactura y retail, entre otras.
Además de la generación de energía aprovechando las energías renovables, Iberdrola está trabajando en procesos de innovación tecnológica para apoyar a la industria a alcanzar sus objetivos de descarbonización, con un enfoque sensible al desarrollo sostenible, e identificando las oportunidades y necesidades actuales.
En este sentido, Iberdrola está invirtiendo en el desarrollo de proyectos para la obtención de hidrógeno verde, es decir, con cero emisiones de CO2.
El hidrógeno es el elemento más abundante en la Tierra, es un combustible universal, ligero y muy reactivo, pero difícilmente se encuentra aislado. Los procesos industriales empleados hasta el día de hoy para obtener este gas son poco sostenibles, sin embargo, el hidrógeno verde se posiciona como una gran alternativa, alineada con los objetivos de descarbonización industrial.
El hidrógeno verde se llama así porque durante el proceso para obtenerlo no se emite dióxido de carbono al ambiente. Su producción se lleva a cabo mediante la electrólisis, un proceso químico en el cual se separa el hidrógeno del oxígeno que hay en el agua.
La electrólisis necesita de electricidad (como su nombre lo indica), y ésta se puede generar a través de sistemas eólicos y fotovoltaicos. Como resultado de este proceso, en el que no hay emisiones contaminantes, obtenemos hidrógeno y oxígeno. El hidrógeno se puede emplear en diferentes industrias como combustible, mientras que las partículas de oxígeno se liberan al ambiente o, de requerirlo, se utilizan en otros procesos industriales. Además, el hidrógeno es de fácil almacenamiento, y puede transportarse por los mismos canales e infraestructura que el gas natural.
Iberdrola ya tiene proyectos avanzados en la materia en América y Europa, y pretende posicionarse como líder mundial de esta tecnología. El grupo se sitúa así al frente del nuevo reto tecnológico que supone la producción y el suministro de hidrógeno a partir de fuentes de energía limpias, utilizando electricidad 100 % renovable en el pro-
ceso de electrólisis.
En México ya nos encontramos en la fase de investigación y estudio de proyectos para empresas interesadas en descarbonización, tanto para la utilización de hidrógeno verde como combustible, así como para proyectos de movilidad.
Iberdrola México trabaja diariamente para que nuestro país se una al esfuerzo global de aprovechar al máximo las energías renovables, y así entregarles a las siguientes generaciones un futuro mucho más limpio.