CINCO ESTRATEGIAS PARA OPTIMIZAR EL CONSUMO ENERGÉTICO INDUSTRIAL
Comparte en Facebook Comparte en Twitter Comparte en Linkedin
La optimización del consumo energético es un pilar fundamental para la sostenibilidad de las industrias. En este artículo, exploraremos cinco estrategias esenciales que pueden potenciar la eficiencia energética y reducir el gasto en los procesos industriales.
1 Monitorizar el consumo energético La base de cualquier plan de reducción de consumo energético es la monitorización. Sin datos precisos, no es posible mejorar. Mediante la monitorización, podemos identificar anomalías, detectar tendencias y evaluar la efectividad de las mejoras implementadas. La monitorización de los consumos puede generar ahorros significativos, estimados entre 5 y 10%. Es crucial concentrarse en información relevante y evitar la sobrecarga de datos. Comenzar midiendo los consumos energéticos de la empresa, los procesos de transformación de energía y los sistemas que más consumen, como la climatización y áreas de producción, proporcionará información valiosa para implementar proyectos de eficiencia energética.
2 Planificación estratégica detallada Contar con una hoja de ruta clara y detallada es esencial para alcanzar los objetivos de reducción de consumo energético. Antes de aplicar cualquier medida, es importante definir metas claras de reducción, establecer plazos realistas y determinar las acciones necesarias para lograrlo. Preguntas como las siguientes guiarán la planificación:
• ¿Cuál es el objetivo de reducción?
• ¿En qué plazo se busca alcanzarlo?
• ¿Cómo se llevará a cabo?
Igual que un navegante que planifica su viaje, una estrategia bien definida nos permitirá mantener el rumbo y reaccionar de manera ágil ante imprevistos. Es recomendable contar con la ayuda de profesionales especializados en gestión energética empresarial para recibir orientación en la implementación.
3 Aprovechar variadores de frecuencia Una vez establecida la estrategia, es hora de implementar proyectos concretos. Los variadores de frecuencia se presentan como una solución eficaz para reducir el consumo eléctrico en motores. Dado que 70% del consumo eléctrico industrial proviene de motores y alrededor de 60% de este consumo se destina al bombeo de fluidos o a la circulación de aire, controlar los motores mediante variadores de frecuencia puede conducir a ahorros notables y alargar la vida útil de los motores. Por ejemplo, el arranque de un motor con un variador reduce el pico de consumo en más de 50% y la regulación de fluidos mediante variadores puede traducirse en ahorros de hasta 50%.
4 Recuperar calor de procesos industriales Una oportunidad significativa para reducir el consumo energético industrial radica en el aprovechamiento del calor derivado de los procesos térmicos. En ocasiones, se genera calor que se disipa, pero ¿por qué no reutilizarlo? Implementar soluciones que aprovechen este calor puede brindar beneficios sustanciales. Por ejemplo, en nuestra planta de Schneider Electric en Puente La Reina, ya hemos implementado una solución para reducir emisiones, incrementar la seguridad y eliminar consumos de gas. Empezamos recuperando el calor disipado por los compresores de aire, reutilizándolo para calentar agua y hornos, lo que nos permitió evitar la emisión de 20 toneladas anuales de CO2. La plataforma de monitorización EcoStruxure Building Operation nos permite supervisar el proceso en detalle.
5 Instalación de microgrids El autoconsumo energético está en alza debido a su contribución a la sostenibilidad y la reducción de costos. Las microgrids, sistemas inteligentes de autoconsumo, pueden predecir la generación energética, pronosticar precios eléctricos y gestionar eficientemente los grandes consumidores de energía. La instalación de baterías complementa la microgrid, permitiendo almacenar energía generada durante períodos de excedente y usarla en momentos en los que sea más económico, cuando se requiera una mayor descarbonización o durante necesidades específicas. Las microgrids proporcionan autonomía y la posibilidad de priorizar el consumo según el precio promedio de la energía, impulsando la gestión eficiente. En resumen, la monitorización precisa de consumos, una planificación estratégica sólida, el uso de variadores de frecuencia, la recuperación de calor en procesos y la adopción de microgrids son pasos clave hacia la reducción del consumo energético industrial. Estas acciones permiten a las industrias avanzar hacia la sostenibilidad y la eficiencia energética, sentando las bases para un futuro más prometedor