En la idílica Costa Azul, donde las curvas costeras se funden con el horizonte mediterráneo, el MINI John Cooper Works Convertible despliega una nueva definición de libertad automotriz. Este modelo icónico, que combina el carácter de un deportivo con la practicidad urbana, encarna la experiencia de conducción a cielo abierto en su máxima expresión.
Su corazón —un motor TwinPower Turbo de 2.0 litros con 231 hp— permite una aceleración de 0 a 100 km/h en tan solo 6.4 segundos, respaldado por una transmisión automática de doble embrague y un sistema de suspensión ajustado para un manejo preciso. A ello se suma la estética purista y deportiva que distingue a la versión JCW: detalles en Chili Red, franjas de competencia, y un difusor trasero del mismo tono que la carrocería subrayan su linaje.
El techo retráctil —disponible con el patrón Union Jack— se abre en apenas 18 segundos, incluso en movimiento, convirtiendo cada trayecto en una invitación al hedonismo móvil. El Always Open Timer mide las horas de conducción al descubierto, una función que hace eco de la filosofía “Always Open” que define a este modelo desde su concepción.
En el interior, la experiencia continúa con un sistema de sonido Harman Kardon, asientos deportivos bicolor y una pantalla OLED central que pone la tecnología al servicio de la elegancia. Los modos de conducción, como Go-Kart y Green, adaptan la experiencia a cada estado de ánimo, mientras los sistemas de asistencia y cámaras 360º garantizan seguridad sin sacrificar emoción.
El MINI John Cooper Works Convertible no es solo un automóvil: es una declaración de estilo y una invitación permanente a vivir el camino con intensidad.