La actividad económica en México se ha venido desacelerando desde 2024 por el cambio de gobierno y un menor gasto en infraestructura, que se ha acentuado en el primer trimestre de 2025 por la política arancelaria de Estados Unidos que impacta en el dinamismo del comercio internacional y genera incertidumbre en las nuevas inversiones.
El área de análisis de Grupo Financiero Monex estima que el crecimiento del PIB será de 0.34% este año y si bien califica el desempeño de la economía como frágil, también observa oportunidades para el siguiente año; en su informe Perspectivas Económicas y Bursátiles 2025.
Las actividades relacionadas con el sector de la construcción y las manufacturas muestran un comportamiento descendiente desde octubre pasado mientras que las actividades del sector servicios y comercio reflejan una notoria atonía.
En general se observa menor dinamismo en el consumo privado y la inversión aunado a la incertidumbre comercial y la desaceleración de las exportaciones.
Janneth Quiroz, directora de análisis económico de Monex Grupo Financiero, destacó que «de enero a abril de 2025 las exportaciones de vehículos ligeros cayeron 7.29% anual, lo cual refleja el incertidumbre en el mercado» por la política arancelaria de Estados Unidos.
Considerando la desaceleración de la demanda agregada es muy probable que la inflación general se mantenga dentro del rango objetivo del Banco de México de 3% más menos un punto porcentual este año; de tal manera que si la inflación continúa en descenso el banco central mantendrá una política de reducción de tasas de interés y se entiende que aumenta la probabilidad de que México no viva un periodo recesivo este año, así como que el crecimiento sea marginal.
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