Trazando el rumbo: Sostenibilidad impulsada por datos en el primer trimestre de 2025

El primer trimestre de 2025 revela un panorama dinámico de sostenibilidad donde los datos y la tecnología guían las estrategias corporativas. Desde emisiones de metano hasta riesgos climáticos, descubre cómo las empresas aprovechan los datos para navegar la transición energética y los riesgos físicos del clima.

JUNIO 09 , 2025
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Navegando un panorama de sostenibilidad en transformación

El primer trimestre de 2025 ha transcurrido en un contexto de incertidumbre geopolítica y prioridades políticas en constante cambio, lo que ha reconfigurado la agenda global de sostenibilidad. La transición hacia una economía baja en carbono y la gestión de los riesgos físicos del clima siguen siendo prioridades clave para las empresas. Sin embargo, nuevas demandas, como el suministro energético para el auge de la inteligencia artificial (IA), la reindustrialización y la búsqueda de seguridad y asequibilidad energética, están llevando a las partes interesadas a ajustar los plazos de implementación. En este entorno complejo, los datos se han convertido en un pilar fundamental para que las empresas tracen un rumbo sostenible, según destaca la última edición del S&P Global Sustainability Quarterly.

Las estrategias basadas en datos permiten a las organizaciones no solo gestionar riesgos, sino también identificar oportunidades emergentes en sostenibilidad. Al aprovechar tecnologías avanzadas, como la detección remota y el análisis predictivo, junto con conjuntos de datos robustos, las empresas están mejor equipadas para abordar desafíos críticos como las emisiones de metano, la doble materialidad y las implicaciones financieras del cambio climático. Este editorial profundiza en cómo los datos y las tecnologías de vanguardia están moldeando las estrategias de sostenibilidad corporativa en 2025, ofreciendo una hoja de ruta para un futuro resiliente.

Aprovechando los datos para abordar las emisiones de metano

Uno de los desafíos más apremiantes en la agenda de sostenibilidad es la gestión de las emisiones de metano, un gas de efecto invernadero con un potencial de retención de calor hasta 80 veces mayor que el dióxido de carbono en un horizonte de 20 años. Los avances en tecnologías de detección remota, como imágenes satelitales de alta resolución y sensores terrestres avanzados, han revelado que las emisiones de metano provenientes de las operaciones de petróleo y gas son significativamente mayores de lo estimado anteriormente. Según investigaciones de S&P Global Commodity Insights, estas nuevas mediciones están obligando a las empresas energéticas a recalibrar sus estimaciones y estrategias de mitigación.

La adopción temprana de estimaciones de metano basadas en observaciones directas ofrece una ventaja competitiva. Las empresas que implementan sistemas para detectar y reparar fugas de metano pueden reducir significativamente su huella ambiental, minimizando riesgos reputacionales y regulatorios. Por ejemplo, el uso de datos satelitales combinados con sensores en tiempo real permite identificar con precisión las fuentes de emisión, lo que facilita intervenciones rápidas y efectivas. Este enfoque basado en datos no solo mejora el desempeño ambiental, sino que también fortalece la confianza de los inversores y las partes interesadas, alineándose con los principios de Experiencia, Expertise, Autoridad y Confiabilidad (E-E-A-T). Además, las empresas que demuestran un compromiso creíble con la reducción de la intensidad de metano pueden posicionarse como líderes en la transición energética, atrayendo capital de inversores enfocados en sostenibilidad.

Doble materialidad: Equilibrando impactos internos y externos

La doble materialidad, un pilar clave de la sostenibilidad corporativa, evalúa tanto el valor interno de las empresas como su impacto externo en sociedad y medio ambiente. Según el S&P Global Corporate Sustainability Assessment, los riesgos climáticos, de transición y físicos, son prioritarios, afectando finanzas, comunidades y ecosistemas. Los datos de S&P Global ayudan a analizar impactos, como la huella hídrica o riesgos de inundaciones, permitiendo a las empresas alinear estrategias con expectativas de stakeholders, equilibrando rentabilidad y responsabilidad social mediante decisiones informadas.

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Financiamiento sostenible: Un mercado en auge

El financiamiento sostenible continúa siendo un pilar clave en la lucha contra el cambio climático. Según estimaciones de S&P Global Ratings, la emisión global de bonos sostenibles alcanzará 1 billón de dólares en 2025, con los bonos verdes liderando el mercado. Estos instrumentos financieros, que canalizan capital hacia proyectos con beneficios ambientales, reflejan la creciente confianza de los inversores en la sostenibilidad como motor de valor a largo plazo.

Los datos desempeñan un papel crítico en este mercado, proporcionando transparencia sobre cómo se utilizan los fondos de los bonos. Los conjuntos de datos de S&P Global permiten a los emisores e inversores verificar que los proyectos financiados cumplen con criterios ambientales estrictos, como la reducción de emisiones o la conservación de recursos naturales. Esta transparencia fomenta la confianza y apoya el crecimiento continuo del mercado de bonos sostenibles, incluso en un contexto de prioridades económicas y geopolíticas cambiantes. Además, las empresas que emiten bonos verdes respaldados por datos creíbles pueden atraer a inversores institucionales que priorizan la sostenibilidad.

Forjando un futuro resiliente

El primer trimestre de 2025 ha puesto de manifiesto el papel transformador de los datos en la sostenibilidad corporativa. Desde la mitigación de emisiones de metano hasta la cuantificación de riesgos climáticos y el fortalecimiento del financiamiento sostenible, las estrategias basadas en datos están capacitando a las empresas para navegar un panorama en rápida evolución. A medida que las prioridades globales, como la seguridad energética y el auge de la IA, compiten por la atención, la capacidad de aprovechar tecnologías avanzadas y datos robustos determinará qué organizaciones liderarán la transición hacia un futuro bajo en carbono.

La colaboración interdisciplinaria, respaldada por datos creíbles, será fundamental para abordar los desafíos globales. Al adoptar estas herramientas y asociaciones, las empresas pueden gestionar riesgos, desbloquear oportunidades y construir un camino hacia un futuro resiliente y sostenible.

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