A una semana de la explosión de una pipa de gas en el puente La Concordia, en la alcaldía Iztapalapa, la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX) confirmó que el vehículo circulaba a exceso de velocidad al momento del accidente que hasta las 10:00 horas de este miércoles 17 de septiembre ha dejado 20 personas fallecidas y 31 hospitalizadas.
“De acuerdo con el primer dictamen que tenemos en hechos de tránsito, tenemos establecido que el vehículo efectivamente iba a exceso de velocidad, de acuerdo al carril por el cual circulaba”, declaró Bertha Alcalde Luján, titular de la FGJCDMX, en conferencia de prensa.
La fiscal señaló que la investigación continúa y que la causa penal por homicidio culposo, lesiones culposas y daños culposos sigue abierta “más allá del fallecimiento del conductor”, identificado como Fernando Soto Munguía, quien perdió la vida el pasado 16 de septiembre. “El objetivo es establecer con claridad qué responsabilidad corresponde a cada uno de los actores relacionados con este terrible incidente”, añadió.
De acuerdo con las primeras indagatorias, la pipa de transporte de gas LP provenía de Tuxpan, Veracruz, donde había cargado combustible con destino a una gasera en la alcaldía Tláhuac. El percance ocurrió cuando el vehículo circulaba por la autopista México-Texcoco e intentó incorporarse a la autopista México-Puebla, momento en el que perdió el control y terminó explotando.
La empresa Silza, filial de Grupo Tomsa y propietaria del vehículo siniestrado, ya compareció ante el Ministerio Público y expresó su disposición de aportar recursos para la reparación del daño. La Fiscalía informó que actualmente se están documentando y evaluando los casos para fijar los montos de compensación conforme a la ley.
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